Bariloche 2-11-2003 fuente wikipedia

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domingo, 20 de noviembre de 2011

Respeto y confianza mantienen vínculos.

Parte 1 de 3.

No todas las relaciones son iguales y el grado en que cada uno se implica emocional y afectivamente varía según sea el vínculo. El interés y el bienestar que nos proporcionan, el nivel de empatía y los afectos que esas relaciones motivan, son factores que determinan nuestra implicación en ese vínculo.

Existe un elemento que debe ser algo en común en todos los vínculos, la incon dicionalidad, ya que no hay una relación que se sostenga en el tiempo si se juzga o se limita al otro. Esto sería, estar, escuchar, apoyar y acompañar lejos de imponer, juzgar y entender al otro a través de nuestro criterio, al contrario, intentar aceptar el suyo. Fácilmente solemos etiquetar a las personas por las conductas que no compartimos, no nos gustan o no entendemos.

Nos enojamos o nos alegramos y manifestamos nuestro amor o desamor, como si ese sentimiento fuese un valor que beneficia a la otra persona si se comporta según nuestras expectativas y nuestro concepto de cómo deben ser las cosas. Sin embargo es necesario poner condiciones en una relación, pero siempre y cuando estén en relación con el grado de implicación y responsabilidad que cada uno tome parte, que no es lo mismo que, por ejemplo, estar con alguien mientras me guste lo que hace, y si no es así, juzgarlo y abandonarlo, esto está más del lado de no apoyar a esa persona y no respetarla.

Puede ocurrir, como ocurre generalmente entre padres e hijos o entre hermanos, que la unión implique un fuerte lazo emocional pero exista algún desentendimiento aunque no una ruptura manifiesta, la relación en apariencia es sólida, pero no se participa de los proyectos de los otros, se considera que se salen del patrón de vida propio o que se alejan de la escala particular de valores. Cuando una relación tiene condiciones, basadas en la responsabilidad mutua, significa que se permanece al lado de esa persona con independencia de sus comportamientos, si sus actos determinan el desencuentro, y el desencuentro es una constante, entonces tendremos que pensar que probablemente, ésa no es una persona adecuada para nosotros.

Este post, es parte 1 de 3 escrita por la Licenciada en Psicología Andrea Fabiana Varela Seivane el 14/9/2009. Aquí la comparto, en dos entradas más completaré el tema, que me pareció sumamente interesante ya que se refiere a nuestros distintos tipos de vínculos.

Si lo has leído y te interesó el tema, te invito a visitarme en pocos días para continuarlo.

Te dejo mis saludos amigo visitante.